Blog personal en el que...

Escribo sobre temas que me interesan, me afectan, me gustan, me intrigan: algo bastante sobre política, pero también hay de urbanismo, diseño y temas diversos.

24.11.10

El Estebanismo comienza a rectificar

Muchos venezolanos hemos criticado al gobierno inmisericordemente. Pero cuando observamos cambios que rectifican posiciones criticadas, debemos reconocerlo sin que nos quede nada guardado. En estos últimos días han habido importantes señales de rectificación, lanzadas muchas de ellas por el mismo Esteban.

Una crítica típicamente feroz ha sido la del culto al personalismo desplegado a lo largo de esta década y denunciado por analistas tan entendidos en la materia como Tulio Hernández, entre muchos. Recorrer el país por carretera, hojear los periódicos y zippear los canales de TV ha significado encontrarnos con Esteban en múltiples poses: montado en un tractor, sentado mostrando que reflexiona con una mano en la barbilla, pegando un alarido en un mítin, abrazando a una viejita o a un niñito, etc. Nunca faltaron conexiones entre tal proliferación de imágenes y el ineludible libro de Orwell '1984' con su referencia al cruel y omnipresente 'Gran Hermano'.

Pero sorprende gratamente que el Estebanismo haya decidido rectificar prohibiendo, a través de un decreto, que se utilice la imagen de Esteban para anunciar obras o demás actuaciones del gobierno a distintos niveles. Felicitamos a Esteban y a su equipo por decidirse a echarle un parao al personalismo. ¡No es fácil! Implica por lo menos doblegar un ego equivalente a un argentino con el cuerpo de Schwarzenegger (cuando estaba joven).

Otra crítica muy reiterada ha sido la de la impunidad con la que campea la corrupción como perro por su casa, a pesar de haber sido uno de los argumentos de peso para que los Estebanistas enrumbaran al país hacia un supuesto cambio profundo de su cultura y sus instituciones. Desde el contrato para imprimir la Constitución de 1999, pasando por el Plan Bolívar 2000, el CAAEZ, el Magistrado que huyó a España, el maletín de Antonini, la plataforma de PDVSA y, por supuesto, los banqueros boliburgueses y Pudreval, entre tantos otros, la sensación de corrupción de todos estos años ha sido tan fuerte como la de inseguridad. Muchos han llegado a calificar a este gobierno como el más corrupto de toda la historia venezolana y eso se dice fácil, pero es toda una hazaña.

Sin embargo, hemos observado con interés que ya se inició el juicio a los responsables de Pudreval y que se insiste muchísimo en enjuiciar, cuando llegue procedente de Colombia, a un individuo que habla mucho pero que es reclamado por distintas autoridades para procesarlo como lo es Walid Mackled. ¡Tampoco es fácil! Uno de los acusados por Pudreval dirigió la Misión Robinson y Makled fue alto pana de muchas altas autoridades y eso corresponde a que, por ejemplo, Claudio Nazoa tenga que acusar a Kiko Bautista por adulterio en Irán, que aunque él no fuera alto ni autoridad, sería apedreado sin clemencia por su falta.

Finalmente, al Estebanismo se le ha criticado duramente todos estos años por declararse enemigo de la oligarquía colombiana y amigo de movimientos insurgentes que, además, dicen en la prensa que están muy vinculados a la práctica de secuestros y narcotráfico. No era solamente el propio Esteban quien hacía esas declaraciones, algunos de sus ministros y diputados de su partido lo afirmaban categóricamente, tanto que seguidores menos mediáticos se sintieron autorizados para expresarlo no solamente con graffitis, sino hasta con una plaza en honor al comandante Marulanda. Existen videos y testimonios en los que se muestra que por un lado los guerrilleros eran bienvenidos al territorio nacional, mientras que por el otro se amenazaba con continuar la ruptura de relaciones diplomáticas si el candidato de la oligarquía, el innegable oligarca Juan Manuel Santos ganaba las elecciones este año.

Pues, aunque usted no lo crea, ahora Santos es el 'nuevo mejor amigo' de Esteban y esa rectificación es digna de admiración y respeto. El gobierno se debe haber dado cuenta del terrible error de no ver lo conveniente que es tener excelentes relaciones con un país vecino para el bien de todos los venezolanos y eso ¡ni de vaina que es facilito de hacer! Mucho más si internamente se mantiene el más abyecto odio enconado contra la burguesía venezolana. Eso se equipara al esfuerzo enorme que alguien a quien no le gusta, por ejemplo, la lengua a la vinagreta y que por eso jamás quiere que se la sirvan en la mesa de su casa, lo invitan a una fiesta y allí no solamente tiene que comerse la lengua sino que además debe decir públicamente que le encanta y que es su plato favorito.

Muchos de los criticones dirán que éstas no son rectificaciones, que son meras jugarretas tácticas e hipócritas porque de no hacerlo sería peor para Esteban y su partido. Pero esa es una actitud muy mezquina. Debemos presumir la buena fé. Eso es lo que predicamos quienes creemos en la Libertad, el respeto a los Derechos Humanos y la dignidad inmanente a la vida en todas sus manifestaciones.

Quien quita que sigan así, rectificando y en 2012, ante la avalancha de votos por el cambio democrático entreguen, en sana paz y en perfecta coordinación, el poder al nuevo gobierno.

17.11.10

Expropiaciones justificadas

La expropiación es una herramienta del Estado para producir cambios que beneficien a los habitantes del país. Una expropiación no debe ser una simple adquisición forzosa de un negocio privado para que ahora el Estado se convierta, simplemente, en el nuevo dueño. Cuando las expropiaciones se convierten en un instrumento para la estatización de la economía, todos los venezolanos salimos perjudicados mientras, muchas veces, quienes se benefician son los pocos que quieren desinvertir en un país que parece aproximarse al barranco del Comunismo.

Para ir desde Chapellín y La Florida hacia el Sur hay que pasar por una especie de embudo de una cuadra, que se llama Calle Cuello, la cual va desde la esquina de la Av. Los Mangos con la Calle Real de Chapellín hasta la Calle García. Desde allí, la ruta hacia el Sur continúa si se hace un pequeño viraje a la izquierda para seguir por la Calle Alameda y luego por la Calle La Estrella, hasta llegar a la Av. Libertador. A esa calle embudo han podido agregarle un apellido para que quede como 'Calle Cuello'e Botella' porque al llegar a la 'Calle Sargento García' (por lo lenta), produce no sólo congestionamiento, sino choques a cada rato.

¿Qué hacer con la intersección entre Cuello'e Botella y Sargento García? Pues expropiar una quinta vieja que queda en la esquina para tumbarla, dar continuidad de la Cuello a la Alameda y colocar semáforos. Dato curioso: todo eso queda a escasas 3 cuadras del edificio de PDVSA, tan absurdamente preocupada por ejecutar obras de urbanismo en la ciudad.

Otro ejemplo de expropiación necesaria: Cerca de allí, en el Boulevard de Sabana Grande a la altura de la Av. 3 de Las delicias, el Gobierno está terminando de construir el CEC, un gran edificio que estuvo abandonado por mucho tiempo. Llama la atención que tres inmuebles viejos quedan atrapados entre los dos frentes que tiene esta enorme torre y que el Estado no haya procedido a expropiarlos para demolerlos y brindar un espacio que integre mejor al boulevard con esta nueva e imponente edificación.

Llaman también la atención los edificios casi expropiados, que quedan en manos de Fogade al ejecutar garantías de bancos intervenidos, como son abandonados e invadidos. Entre ellos destaca la enorme torre ubicada en la Av. Andres Bello, a apenas 3 cuadras del recién absurdamente expropiado Sambil de La Candelaria, que ahora deberá expropiarse a la gran cantidad de invasores que se han adueñado de ella para desmantelarla impunemente.

Inversionistas extranjeros y nacionales vinculados a CANTV, EDC, Sidor, etc., quizás exhalaron emocionados y satisfechos, cual ganador de lotería, al recibir sus cheques por la estatización de sus empresas. Sin embargo, la economía no creció con esos actos y muchos programas sociales básicos en materia de salud, educación e inraestructura se vieron disminuidos por el desvío de los recursos hacia la estatización que no es más que un simple cambio de dueño. El mensaje que se deja en el ambiente es que en Venezuela hay un gobierno insaciable que quiere adueñarse de todo.

Los más recientemente expropiados no han contado con la suerte de recibir rápidamente sus cheques y el mensaje que queda en el ambiente es que ahora el pulpo-estado agarra sin ni siquiera respetar las leyes que protegen la propiedad. Mientras tanto, mejoras concretas como las referidas más arriba, no las hacen.

Los estebanistas, a pesar de los enormes ingresos petroleros que han administrado, se han esmerado en empobrecer a Venezuela y, todavía peor, han instaurado el absurdo como principio rector de las políticas públicas: lo que deben expropiar no lo hacen, mientras se desviven por expropiar lo que no produce ningún valor agregado al país, sino desinversión.

La Democracia, respetuosa de las libertades y los derechos humanos, a diferencia del Estebanismo, sí ofrecerá a partir de 2012 un conjunto claro de reglas de juego que impulsen la inversión, con la consecuente creación de empleos y oportunidades que brinden prosperidad para vastos sectores de la nación. Un ambicioso programa de re-privatización corregirá los entuertos, incentivando nuevamente la inversión y obteniendo ingresos frescos para impulsar significativos programas sociales para todos los venezolanos. Pero también, deberá hacerse un uso inteligente de la expropiación como instrumento de políticas públicas, usándolo para mejorar la movilidad en nuestras ciudades, ampliar los espacios públicos y construir modernas instalaciones recreativas, deportivas y culturales que eleven drásticamente la calidad de vida y el atractivo turístico de nuestro destartalado país.

9.11.10

La Propiedad es un avanzado instrumento social

Tradicionalmente, desde la 'izquierda' se ha considerado a la Propiedad como un insondable maleficio que una horrible bruja lanzó para destruir la armonía entre los seres humanos. Engels fue uno de los autores que propuso, junto con su pana Marx, que una de las tareas más importantes para la humanidad era la de eliminar la Propiedad. Lo peor es que algunos dijeron y todavía otros siguen diciendo, hipócritamente, que ellos están seguros de que éso es lo que hay que hacer, pero siempre que ellos mismos asuman el control sobre la toma de decisiones referidas a lo expropiado.

Marx y Engels tenían que echarle la culpa a algo y a alguien por las injusticias. Las injusticias se manifestaban al hacer comparaciones entre unos pocos que tenían mucho y unos muchos que tenían poco o nada. Cansados los pocos de cuidar lo mucho que tenía cada quien, decidieron organizarse para crear juntos un Estado, o servicio de vigilancia y protección de todo lo que en conjunto tenían dentro de una determinada frontera: tierras, animales, casas, castillos, fábricas, etc., para que los que no tenían, fuesen de adentro o de afuera de la frontera, respetaran lo ajeno, o sea, la Propiedad.

Si alguien que tenía poco pasaba a tener mucho, inmediatamente sufría una especie de ataque de amnesia y comenzaba a estar de acuerdo en que el Estado lo protegiera también a él de los usuales intentos de arrebato que podrían venir de los que no tenían nada. Hasta quienes lograban arrebatarle propiedades a otro, se las arreglaban para que ahora ellos fuesen reconocidos como los legítimos propietarios y así pasasen a ser debidamente protegidos por el Estado.

Ante tanto aparente despelote, a Marx y Engels se les ocurre una idea que, medio siglo más tarde, Lenin lleva a la práctica: eliminar la Propiedad porque hasta quienes parecían comportarse como santos en un momento dado (porque eran pobres - y aquí la izquierda hacía un guiño hacia cierta prédica católica), se convierten en demonios apenas comienzan a acumular cierta cantidad de propiedades, sobre todo cuando son propietarios de máquinas o cualquier otra cosa considerada 'medio de producción'.

¿Pero cómo reconocer que se está ante un propietario? ¿Es suficiente que muestre documentos? No, sólo era posible afirmar que todo lo que existe en una comarca pertenecía a un señor feudal, cuando se observaba que era él quien decidía directamente sobre todo lo que había en esa comarca. Lo del registro, la notaría o las facturas que demuestren las compras (que muchas veces nunca ocurrieron) resultarían algo secundario. Lo importante era su capacidad real para la toma de decisiones sobre qué hacer con siervos, tierras, animales, etc.

Cuando las decisiones del señor feudal no eran aceptadas, obedecidas, ejecutadas o respetadas, sus siervos comenzaban a dejar de ser siervos y sus tierras comenzaban a dejar de ser suyas, en un proceso que se orientó históricamente hacia una redistribución de las decisiones en más y más personas, que luego necesariamente se expresaba en una desconcentración de la Propiedad. Si Marx y Engels no hubiesen tenido una visión tan reduccionista, probablemente se habrían percatado de que la Propiedad funcionaba como un instrumento social que permite la desconcentración de la toma de decisiones.

Así la Propiedad puede verse, no como causa de discordias sino, como instrumento social que permite que las decisiones sobre uso, modificación, venta, regalo, etc., de bienes muebles o inmuebles puedan ser tomadas, no por un solo individuo, sino por muchos, cada quien las suyas. Querer eliminar la Propiedad expropiando a muchos, o a todos, para convertirla en social, pública o estatal, implica regresar a una especie de Régimen Feudal o hasta Monárquico concentrando la toma de decisiones en un grupete de funcionarios del Estado, especialmente si éstos obedecen ciegamente las órdenes de un 'comandante-presidente' que será en la práctica el dueño de prácticamente todo.

Los siervos del Señor Feudal de Corea del Norte hacen coreografías muy impresionantes por sus colores y sincronización de movimientos. También bajo esa tutela monarquicoide, ese país ha logrado desarrollar un cierto poderío militar atómico. Cuba con sus hermanos feudales (sobre todo con el mayor, Feudal Castro) se luce con comparsas de banderitas, quizás por tropicales menos ordenadas que las de Kim Il Sung, pero con un ejército supuestamente preparado para repeler nada menos que a la primera potencia militar que los acosa a apenas 80 millas de distancia por el Norte. Sin embargo, ambos países ostentan economías de subsistencia que no despiertan ni el más tímido gesto de envidia por parte de casi nadie en el planeta; por el contrario, son países pobres a la espera de un cambio que les permita a sus ciudadanos desarrollar sus potencialidades y mejorar su calidad de vida.

Desde los prejuicios marxistas y la ignorancia cuartelaria, el Estebanismo se convierte en la excepción al realizar enormes esfuerzos para convertir a Venezuela en uno de esos pocos países reubicados en la Edad Media. Ante la creciente agresión contra la Propiedad de los venezolanos, no podemos limitarnos a responder diciendo que se trata de un Derecho Humano o de un Principio Básico, como si estuviésemos refiriéndonos dogmáticamente a uno de los 10 Mandamientos que el mismo Dios le entregó a mi tocayo en el Monte Sinaí. El asunto es más sencillo y debe explicársele claramente al pueblo venezolano: la Propiedad no es un dogma, es un moderno y avanzado instrumento social para desconcentrar la toma de decisiones, para que las decisiones sean más democráticas y mejor pensadas, para permitir que haya muchísimas más cabezas analizando consecuencias, riesgos y oportunidades de cada decisión importante que se tome en el país.

La Propiedad es el instrumento que utilizan actualmente las sociedades más avanzadas, en las que hay más desarrollo y mejor calidad de vida. Es el computador contra el ábaco. Porque seguramente ningún venezolano (incluyendo a la mayoría de los estebanistas) querrá regresar a la Edad Media, aunque Esteban, junto a Osama Bin Laden y los antes mencionados, se empeñe en obligarnos a hacerlo.

4.11.10

¿Ceguera cognitiva o ética?

Hace años me sorprendió escucharle a Humberto Maturana el concepto de 'ceguera cognitiva' referido como un 'no sabemos que no sabemos' algo. Es fácil derivar los otros 3 casos que no producen tanto riesgo: 'no sabemos que sabemos', 'sabemos que no sabemos' y 'sabemos que sabemos' algo. Al asumir una nueva responsabilidad, es natural que cierta ceguera cognitiva esté presente. Pero luego de unos cuantos años haciendo algo (12 por ejemplo), es muy sospechoso que ese algo se siga haciendo mal. Lo más probable es que estemos no ante una ceguera cognitiva, sino ética.

Por ejemplo, la situación del tráfico y transporte público en Caracas. La ciudad no ha dejado de empeorar su ya pésima movilidad de finales del siglo pasado. Medidas como el Día de Parada y la prohibición de circulación de motos en autopistas en los 80s; los intentos de aumentar la gasolina y liberar el precio de los estacionamientos en los 90s; sumados al impecable esfuerzo del sistema Metro / Metrobuses bajo la dirección de Pepito González Lander durante esas mismas décadas, han sido no menos que despreciados por el Estebanismo del Siglo XXI. Apenas han logrado implantar ciertos canales de reflujo en autopistas y una línea de tren hacia Los Valles del Tuy, cuyo impacto ha sido marginal sobre el deterioro generalizado de Caracas.

Consecuencia: la ciudad es una especie de largo estacionamiento que los caraqueños atraviesan para llegar usualmente tarde a sus destinos y donde algunos hasta terminan siendo objeto de atracos. Mientras tanto 'chivos' estebanistas de cualquier tamaño se desplazan con escoltas y los célebres motorizados 'moscas' con los que tan antipáticamente, las autoridades gubernamentales venezolanas desde mediados del siglo pasado hasta el presente, han hecho y hacen alarde en un cotidiano abuso de poder, para dejarnos bien claro a los demás ciudadanos que la movilidad de ellos es la única importante. A nosotros, que les pagamos sus sueldos de funcionarios públicos, nos toca calarnos colas y malandros mientras intentamos desplazarnos bajo terribles niveles de polución, ruido, incomodidad e inseguridad.

Argumentar que los estebanistas quizás sean tan ignorantes que no saben que no saben y por éso no logran mejorar la movilidad, después de 12 años en el poder, es caer en la complicidad de excusarlos. Lo que tienen es ceguera ética: simplemente no les importa que los ciudadanos tengamos tan baja calidad de vida. Grupos de defensa de los animales aplican el término 'ceguera ética' a los ciéntificos que hacen experimentos en los que los animales sufren cruelmente, sin darse por aludidos y 'sin aguárseles el ojo'... A Caracas se la ha convertido en un experimento social en el que diariamente sus ciudadanos sufren aprendiendo obligados que ahora 'time is NOT money' porque 'ser rico es malo'.

Tampoco creo que no saben que no saben que varias tasas de cambio crean enormes distorsiones en la economía de Venezuela, que altos niveles de gasto público crean alta inflación, que estatizar es una clara violación al derecho de propiedad y a la Constitución, que las cárceles son desastrosas academias del delito, que importaciones masivas afectan la producción nacional, etc. Si un estebanista quiere vender un apartamento que compró en 2007, él sabe que sabe que hubo mucha inflación y por éso fijará un precio de venta en 2010 que incluirá al menos un ajuste por IPC. Pero, por otro lado, hipócritamente, intervendrá para impedir a urbanismos privados que hagan ese tipo de ajuste.

Es el mismo comportamiento que tiene en las calles: el estebanista se las arregla para no calarse la cola que el resto de los ciudadanos sufre, porque además él, sintiéndose diferente y privilegiado, trancará más el tráfico pasando.

Los casos desde la ética son más complejos que los referidos a lo cognitivo. Sin embargo, partamos de lo que Jesucristo propuso con el 'no hagas a otro lo que no querrías que te hicieran a tí' y tendremos claro que el caso de la ceguera ética es cuando 'haces a otro lo que no querrías que te hicieran a tí' o también cuando 'no haces a otro lo que querrías que te hicieran a tí'. ¡Qué diferente será la ciudad o el país cuando las autoridades se dediquen a hacer, para todos, lo que quieren para sí mismos! Serán unos ciudadanos más que en condición de servidores públicos, pero sin privilegios que los diferencien de nosotros, vivirán directamente con las ventajas y desventajas que ofrece la ciudad y el país que gobiernan.

Cuando sepa que sé, o sea que me conste, que los estebanistas usan transporte público, hospitales públicos, escuelas públicas, porque todo funciona de maravilla y, además, tienen los mismos cupos en dólares (aunque lo ideal es eliminar el control de cambio), no pretenden imponer a los demás su pensamiento único, ni abusan de ninguna manera del poder que democrática y temporalmente les cedemos todos los venezolanos... no me quedará éticamente otra opción que ir rapidito (sin tener que calarme un tráfico del demonio) a inscribirme en el PEUV (Partido Estebanista Unido de Venezuela).