La investigadora española M.A. Urrutia (1) usó para ilustrar lo contrafactual, lo imaginario, estas frases en las primeras páginas de su tesis de doctorado: “Si hubiera llamado a mi novio, habríamos ido al cine.” “Si hubiera aparcado más cerca, habría llegado a tiempo a la cita.” Estas frases se refieren en una primera parte, o antecedente, a algo que habría podido ocurrir; y, luego se refieren en una segunda parte, como consecuencia de haber sucedido lo primero, a algo que hubiera ocurrido también. Son frases que producen cierta desazón, pero nada grave. La investigadora describe los efectos de esta manera pensar y sentir, así: «Las personas más dadas a rumiar las experiencias pasadas, especialmente con resultados negativos (v.g., adultos de avanzada edad o personas depresivas) incrementan la frecuencia de expresiones contrafactuales.»
Aparte de rumiar en silencio o a capella… ¿Quién no ha escuchado a alguien (padres, tíos, profesores, etc.) decirle a otro, o a nosotros, frases parecidas? Por ejemplo, algo como: “Si no hubieras renunciado a la transnacional hace 15 años, no estarías hoy pasando trabajo.” El uso del subjuntivo Pretérito PlusCuamPerfecto (PPCP) -si hubieras…- puede convertirse en una especie de regaño para controlar a otro en una relación de poder y no sirve para nada a quien se le dice, porque: ¿Cómo regresar al pasado para evitar apretar el botón de send, y así impedir que saliera el email que contenía la carta de una renuncia voluntaria? Eso solo es posible en el cine, las novelas y los cuentos.
¿Qué tiene entonces que ver el subjuntivo PPCP con lo contrafactual y el análisis político? ¿Cómo la situación miserable en la que se encuentra Venezuela se relaciona con ciertos análisis que se ha hecho costumbre aceptar en los medios, sin chistar? ¿Existe alguna manera de detectar esos análisis que producen daños psicológicos, entre otros, en lugar de cualquier otro posible beneficio que aparenten ofrecer?
El subjuntivo PPCP se ha usado en Venezuela para hacer daños recurrentes, manipulándose a la gente de tal manera que termina aceptando, como si fuese inevitable, la continuidad del régimen militarista que ha sumergido a la gran mayoría de los venezolanos en un pozo de miseria. Lo contrafactual para desalentar a la gente, basado en el uso del subjuntivo PPCP, es algo como esto: “Si hubieran hecho lo necesario para derrotar al régimen, ya se habría salido de él; pero el régimen seguirá en el poder mientras no logren hacer perfectamente todo lo que hay que hacer.” Esa supuesta recomendación es en sí misma inalcanzable, porque implica ejecutar acciones exhaustivas, impecables, o sea algo pluscuamperfecto; es decir, hacer algo solo concebible y ejecutable por una especie de dios.
Como los venezolanos somos simples mortales, al hacer ese tipo de planteamientos ciertos analistas buscan que, simplemente, la conclusión lógica sea coexistir con el régimen o, en todo caso, irse del país. Hide or flight, never fight: esconderse o irse, nunca enfrentarse; justamente lo que el régimen depredador necesita para perpetuarse. Y esto ocurre porque frases cargadas de subjuntivos PPCP, desbordantemente irreales pero ensambladas de tal manera que parecen verdades académicas o científicas, las aceptamos cotidianamente sin ofrecer resistencia. Analistas que gozan de buena reputación las dicen (no tanto las escriben, de eso me dí cuenta por la dificultad en encontrarlas directamente haciendo búsquedas textuales en sus artículos) y medios, supuestamente opositores, aceptan divulgárselas.
He aquí una muestra:
El siguiente párrafo no tiene directamente un subjuntivo PPCP pero es un “como si,” una comparación para atacar retóricamente a un oponente, no para entender mejor la situación: “Eso es como decirles a los venezolanos que tú estás nombrando un emperador, un Carlos V que no tiene que validarse ni ir a ningún proceso electoral, que no importa si es popular o no, que no importa si aglutina o no a las fuerzas opositoras y se queda per saecula saeculorum porque el «fin de la usurpación» no está a la vista.”
Luis Vicente León, Septiembre 2020, Revista Nueva Sociedad. https://nuso.org/articulo/venezuela-Maduro-Guaido/
En la entrevista este analista se empeña en demostrar la capacidad del régimen de seguir derrotando a la oposición. Es un conjunto de comentarios que describen la deplorable situación política; pero no hace un verdadero análisis de causas de lo que ha ocurrido y de las terribles consecuencias si continúa enquistado un régimen militarista como el actual. Y este analista generalmente se presenta como opositor, o neutro, y lo entrevistan muchos medios supuestamente opositores, o neutros, para que esa audiencia escuche algo tan interesadamente desalentador. Ante el paisaje que pinta este analista, sobra la pregunta: ¿Por qué tantos venezolanos han emigrado? Hasta este mismo analista parece que también se fue. Si en efecto ya está en el exterior ¿Por qué persevera en su empeño en decir cosas que beneficien al régimen?
El próximo párrafo es un condicional, no exactamente un PPCP, en el que el autor como que casi quiere anticiparse a decir un “te lo dije y no lo hiciste”: “Si el gobierno logra unilateralmente reactivar la economía del país (y en buena medida va en camino de lograrlo) a pesar de las sanciones internacionales y sin el concurso de la oposición, esto sería una tragedia política para esta última. ..Por el contrario, si el gobierno y la oposición deciden reactivar juntos a la economía, ambos capitalizarán el resultado y la recuperación sería asombrosa. Los venezolanos, en especial los empresarios, tienen hambre de salir adelante y de volver a tener la calidad de vida que tenían antes. Son signos evidentes de los tiempos actuales.”
Jesús Seguías, Enero, 2022, El Reporte Global.
https://www.elreporteglobal.com/la-reactivacion-del-maduro-vete-ya/
Este analista secunda al anterior analista en sus intenciones de aprovechar oportunidades que le brindan medios opositores, para insistir en cosas como construir un cambio parcial o engañoso: en nombre de “empresarios con hambre de calidad de vida” (mientras más del 90% de la población sufre literalmente de hambre) plantea la necesidad de que “ambos bandos”, presentados como si fueran igualmente responsables del desastre que es Venezuela, se pongan de acuerdo para que por lo menos la economía funcione. La economía y, en general, todas las instituciones republicanas y la cotidianidad de la gente, tienen que ver con un cambio profundo en materia política. Pero eso no lo dice, porque al régimen militarista no le conviene.
Por último el párrafo de un analista, economista, vinculado a los acreedores de la deuda conocida en predios opositores como bonos del hambre (endeudamientos de PDVSA y la Nación, despilfarrados impunemente por quienes los aprobaron, mientras ellos mismos destruyeron la principal industria del país). Desde esa óptica ¿Para qué se atreve a opinar más como abogado que como economista? Por supuesto, para tirarle pedradas a la oposición: “Esto sugiere que la decisión podría haber sido diferente si no hubiera estado pendiente un procedimiento de anulación en el CIADI en la solicitud de poner al lado la no comparecencia… El punto es que no presentar una defensa en los casos de reconocimiento hasta que se haya emitido la certificación de no comparecencia, involucra riesgos. Uno de ellos es que el tribunal puede no aceptar anular la entrada de no comparecencia. La otra es que aún en caso de hacerlo, lo vea como una medida dilatoria y lo lleve a estar menos dispuesto a presumir buena fe del demandado al considerar argumentos posteriores.”
Francisco Rodríguez, Octubre 2021, Reporte Global.
https://www.elreporteglobal.com/se-ha-debilitado-la-defensa-de-activos-durante-el-gobierno-interino/
Como si fuera un lobbista del régimen, busca ver de qué manera logra dañar la reputación de la oposición. Esconde lo insólito del abuso y la corrupción que rodean al tema que aborda y enfila sus baterías contra quienes buscan concretar un cambio político lo antes posible. Con finesse académica ataca a quienes luchan por salvar lo poco que el régimen depredador no ha podido destruir todavía.
¿Qué podemos hacer los venezolanos? Los jóvenes acostumbran a gritar ¡Spoiler Alert! para impedir que les cuenten demasiado una película o un libro que aún no han visto o leído. Por ello, propongo hacer uso del grito ¡Subjuntivo Alert! cada vez que leamos o escuchemos algo y nos demos cuenta de que estamos a punto de caer como presas del uso manipulador de ese modo verbal. Detectar a tiempo ese uso manipulador del subjuntivo PPCP (o de estrategias retóricas equivalentes) ayudará a que analistas empeñados, consciente o inconscientemente, en justificar al régimen que le ha declarado la guerra a los venezolanos, sean cada vez menos efectivos en hacerla.
A la mayoría de las personas les puede asustar que les gritemos ¡Subjuntivo Alert!. Pero es cuestión de atreverse y estar preparados para explicarles de qué se trata el rollo. Sea de manera directa o a través de los medios, lo contrafactual (fuera del mundo del cine, las novelas, los cuentos y del arte en general) usado para manipular a la gente, es super dañino y nos conviene combatirlo como parte de lo que debemos hacer en esta guerra híbrida en la que estamos, tal como la llama mi analista preferido Georg Eickhoff (2).
Pero esto último quedará para un próximo ensayo.
1. Urrutia, M.A. (2009). Bases cognitivas y neurológicas de la comprensión de textos contrafactuales. Serie Tesis Doctorales. Universidad de la Laguna. Santa Cruz de Tenerife.
2. Eickhoff, G. https://twitter.com/JorgeEickhoff
Imagen de Bart Simpson tomada de "Subjuntivo con verbos de influencia y voluntad"
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por el comentario! Podrá ser publicado una vez revisado...